5 Técnicas de Estudio que Mejorarán la Concentración de tus Hijos
Empecemos por lo obvio: es totalmente normal que tu hijo se desconcentre mientras estudia. Esto puede suceder por muchísimas razones como: qué tan motivado está con la tarea que debe realizar, qué tan cansado está, qué instrucciones le dieron o cómo entendió lo que debía hacer y otros cuantos estímulos. Sin embargo, alguna vez te has preguntado: ¿cómo ayudar a mi hijo a concentrarse?
La buena noticia es que puedes ayudar a tu hijo a concentrarse con 5 técnicas de estudio que mejorarán la concentración de tus hijos:
Empecemos jugando. Sí, jugar ayuda a desarrollar ciertas habilidades en tu hijo, por eso, juega con él. Una de las opciones con la que pueden divertirse juntos es el tradicional juego de bloques de memoria (acá te dejamos un link donde puedes jugarlo en línea). Este sencillo juego, que puedes potenciar con premios por cada partida ganada, ayuda a mantener la concentración en objetos e imágenes sencillas, depurando estímulos que no sirven.
Aunque seguramente ya lo conoces, este juego consiste en que, sorpresivamente, la otra persona se quede totalmente quieta, sin hacer un solo movimiento después de que alguno de los dos grite “congelado”. Este juego ayuda a la concentración, pero sobre todo a mantener al autocontrol, muy necesario para cuando tu hijo tenga tareas estresantes. También sirve para ganar disciplina en tareas que necesiten total inmersión y dedicación.
Recuerda que los niños quieren ser niños por sobre todas las cosas. Está muy bien dar lo máximo de sí mismo para realizar una tarea, está muy bien dedicarse 100% en una labor, pero excederte en el esfuerzo puede llegar a ser contraproducente y hacerle perder su concentración. Recuerda que su tiempo de atención es limitado. Por eso, es importante que tengan espacios de relajación y juego que ayuden a despejar la cabeza y volver a las tareas con la mente fresca.
Pongamos un ejemplo: le dices a tu hijo que debe organizar su cuarto. ¿Por dónde empezará?, ¿qué debe recoger primero?, ¿si ordena el armario, desordenará la cama? Es muy probable que a tu hijo le resulte agobiante saber que tiene una tarea grande por hacer. El truco es subdividir esta gran tarea en una serie de pequeños pasos que puede completar pasito a pasito. Así, además de sentir cada tarea más liviana, podrás guiarlo en entender el orden de un proceso y a seguirlo, o incluso a construir su propio procedimiento porque le enseñarás a priorizar las tareas para que pueda hacerlo por sí mismo.
Llevar un horario ayuda a mantener la disciplina. Además, obliga a establecer un límite de tiempo para cada tarea, lo que hará entender a tu hijo que el tiempo vale oro y que debe aprovechar cada segundo, aumentando su concentración. No es cuestión de crear una carrera contrarreloj, el afán no es necesario; hazlo entendiendo sus tiempos y recuérdale la importancia de lograr lo que se ha propuesto en el tiempo del que dispone.
Además de estos 5 consejos para aumentar la concentración de tu hijo, puedes hablar con él/ella para saber qué le motiva, entender qué piensa cuando recibe una tarea, qué es lo que más le cuesta hacer y por qué, para comprender sus propias motivaciones. Creen juntos nuevos métodos y maneras de potenciar su concentración y aprendizaje, haciéndolo ver como algo divertido y recordándole que lo importante es disfrutar lo que se hace.
